Euclides, Piet Mondrian y la matemática victoriana

junio 15, 2015

Los seis elementos de Euclides, Piet Mondrian y la matemática victoriana

Formas, colores y diseño gráfico antes de que se inventara el diseño gráfico.

Los seis elementos de Euclides, Piet Mondrian y la matemática victoriana

Oliver Byrne era un matemático e ingeniero civil. El señor Byrne vivía su vida como un buen señor del siglo XIX, hasta que decidió escribir un libro que ayudara a la gente a comprender más claramente el mundo de las matemáticas. Y fue así que en 1847 publicó una versión explicada y aumentada de “Los elementos”, de Euclides.

Hasta aquí podríamos decir que nada especial ocurrió, salvo que el señor Byrne tenía un exquisito gusto por el diseño y las ilustraciones de su libro, se adelantan unos 100 años al arte en colores primarios que desarrollaría Piet Mondrian. Byrne era además un victoriano racionalista con un profundo amor por el conocimiento. Esto lo llevó a entender –mucho antes incluso que el concepto de diseño gráfico existiera- que la “elegancia gráfica” podría ser de una enorme ayuda para la enseñanza y la comprensión.

Según sus palabras, “los diagramas coloreados y los símbolos son usados en lugar de letras para la mayor facilidad de los estudiantes”.

El libro de Byrne es considerado uno de los título más originales del siglo XIX, e incluso hoy sigue siendo admirado. Como ejemplo, el trabajo de  Helen Friel (ilustradora e “ingeniera en papel”) que basadas en las ilustraciones de Byrne, creo unas preciosas esculturas / origami que han causado sensación entre los bibliotecarios e ingenieros de Lectorati por igual.

Los elementos de Euclides ha sido editado por Wener Oechslin en la editorial Taschen.
El modelo de papel del teorema de Pitágoras para doblar y armar, se puede descargar gratuitamente desdeeste enlace: EuclidPythagoras

 

 

Los elementos de euclides: los primeros seis libros

Oliver Byrne

Rojo, amarillo, azul –y por supuesto negro– son los colores que emplea Oliver Byrne para las figuras y diagramas en su muy poco corriente edición de 1847 de Euclides, publicada por William Pickering e impresa por Chiswick Press, y la cual induce al sorprendido lector a pensar en Mondrian. El autor deja claro en su subtítulo que ésta es una medida didáctica dirigida a distinguir su edición de todas las otras: «Los Elementos de Euclides en el que son usados diagramas y símbolos a color en vez de letras para mayor comodidad de los estudiantes». Byrne no se contenta con confiar sólo en la estructura «logica» supuestamente intuitiva de los axiomas y teoremas de Euclides –¿quién no conoce las famosas primeras frases de los Elementos de Euclides: «I. Un punto es eso que no tiene partes. II. Una línea es longitud sin anchura»?–, sino que los traduce a diagramas y símbolos coloridos. Así que piensa en términos de un aula escolar: compara sus colores con las tizas teñidas con que se dibujan las figuras en la pizarra.

Fuente: Lectorati

 

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