Por Jose Racioppi.
Ya lo dijo un conocedor del medio: “Estamos programados para recordar las grandes historias, desde niños lo hemos hecho y mucho de eso no ha cambiado, incluso cuando somos adultos mayores”. Me disculpo de antemano, porque no recuerdo quién fue el autor de esta frase, pero la certeza de la misma no se discute.
Las grandes historias son las que logran trascender nuestra memoria a corto plazo y plantarse de manera fija en nuestros recuerdos. No siempre las tenemos presentes, pero su efectividad genera que, con una simple estimulación de sentidos, nuestras neuronas activen la delgada línea eléctrica donde está almacenado el recuerdo.
Gracias a las buenas historias, sus autores (las marcas/marketeros) logran decirnos que hacer y de paso, que los queramos por hacerlo, pero, ¿cuál es el secreto de las grandes historias? Cada “escritor” tiene sus pasos, su fórmula secreta, para mi (un publicista más del medio) estos son los cinco pasos (introductorios) para ejecutar un buen Storytelling.
- Conoce tu marca, como te conoces ti mismo Los grandes autores, antes de escribir una historia, conocen hasta el más mínimo detalle de sus protagonistas. Cuando empezamos el proceso de crear una historia para nuestro anunciante, debemos conocer cada mínimo detalle de su existencia: su historia, ventas, reputación, número de empleados, valores y todo lo que rodea al ser que paga nuestros servicios.Una vez sepamos dónde tiene los lunares nuestro protagonista, procedemos a escribir los primeros capítulos de la historia.
- Conoce al target, también como te conoces a ti mismo
Si es importante conocer al protagonista, también lo es conocer a los lectores. Para escribir el segundo capítulo de nuestra historia, debemos conocer el target al que será dirigida, y con esto no me refiero a una segmentación arcaica de “edad, sexo, estrato”. Cuando hablo de entender el comportamiento de nuestro consumidor objetivo, me refiero a entrar en su sistema límbico y descubrir qué insights podemos utilizar para causar el impacto deseado. Descubrir estos comportamientos no es tan complicado como se lee, a través de una stalkeada minuciosa en las redes sociales podemos lograrlo. - Escuchar el ECO de las tendencias Esta más que claro que CONOCER importa, pero en la jerarquía de relevancia, escuchar el eco de las tendencias, es uno de los pasos que también tiene un protagonismo importante. La idea es descifrar el contexto de las tendencias y ejecutarlas en nuestras historias en un segundo plano, o sea, que esta tendencia impulse nuestro concepto, no al contrario.Un ejemplo de esto es lo que realizó Samsung con el Ice Bucket Challenge, tomaron una tendencia para impulsar el beneficio directo de su producto.
- Elegir las herramientas indicadas. No es lo mismo leer una buena historia en un libro desgastado, roto y con la tinta desvanecida; a leerlo en un tomo de pasta dura, con un exquisito olor vintage y una textura que produce placer cada vez que abrimos el libro. Evidentemente, elegir la herramienta adecuada para ejecutar tu historia es de vital importancia, visualmente te aportará un apoyo enorme, pero el apartado interactivo te garantizará la permanencia del consumidor y su eventual conversión. Claro que no siempre hay que irse por lo más caro o extravagante, cuando la creatividad hace su entrada, se puede sacar jugo de lo más sencillo.
- Elegir el dónde y el cuándo se hará la historiaPor último. Después de que tu historia esté culminada, hay que escoger la editorial que la publicará y el momento exacto para hacerlo. Escoger la red social no ha de ser complicado si se hizo el paso 2 de manera efectiva; elegir cuándo, depende de otras variantes. Depende de si tu contenido está vinculado conceptualmente con una festividad o de si esa festividad impulsará tu contenido.
Bueno stalkers, me queda solo decir que cada quien tiene sus pasos para crear un storytelling efectivo, estos cinco que vieron son los míos, en algunos casos los alterno, dependiendo de las necesidades del cliente y de su presupuesto, pero en general, estos pasos me han servido para satisfacer las necesidades de quien me paga. Obviamente hay otros pasos que van más ligados al área de las estadísticas y mediciones, pero sobre esos ya hablaremos en otra ocasión.
Fuente: Stalkeando el Medio, 2015