Dime si esta historia te suena:

Acabas de invertir dinero en contratar a una empresa o a un diseñador web para que te hagan la página web de tu negocio.

Piensas que es una buena forma de hacer que tu negocio logre más ventas.

Todo el mundo dice que hay que tener una página web en internet, para llegar a más gente, para que te conozcan.

A fin de cuentas, tus competidores ya tienen una página web y tu no puedes ser menos que ellos.

El caso es que una vez que ya tienes tu nueva página web, las ventas no llegan. Y no es que no lleguen las ventas, es que los que no llegan son los visitantes a tu web.

¿Por qué no llegan visitas a tu web?

Llevo muchos años en el negocio del diseño web, he hecho páginas web para emprendedores, para empresas que empiezan y para empresas medianas que ya llevan años funcionando.

Todos suelen tener algo en común: se creen que una vez que tengan su página web en internet, todos sus clientes potenciales van a entrar a trompicones en su web.

Seguramente tengan la imagen esa que todos vemos en las noticias el día en que empiezan las rebajas. Cientos de clientes deseosos de gastar su dinero. Pero eso no pasa.

Con millones de páginas web ahí fuera, tienes que entender que cuando acabas de publicar tu página web es la última de la cola.

No me malinterpretes. Con una página web puedes lograr cientos de ventas y aumentar tu facturación y tu negocio. Pero déjame decirte que eso no va a pasar de la noche a la mañana. Requiere tiempo y una inversión económica por tu parte.

Tus clientes potenciales no van a saber automáticamente cual es la dirección de tu página web y por supuesto no van a visitar tu página web a manos que tu les hables de ella.

Simplemente porque tu acabes de publicar tu nueva web, no es razón suficiente para que tus clientes potenciales ni la busquen siquiera.

Sin una estrategia bien definida y planeada para generar visitantes a tu página, tu web simplemente va a quedar en medio de todo el ruido que existe en internet.

Como te he comentado antes, llevo muchos años trabajando en este negocio (monté mi empresa en el 2009) y ya he visto un montón de casos similares.

Normalmente todo el mundo es consciente de que necesita una buena página web. Hoy en día Internet es algo cotidiano que ya forma parte de nuestras vidas.

El siguiente punto normalmente está relacionado sobre cuánto cuesta una página web. Incluso para una página web básica vas a tener que invertir entre 600€ y 1000€ (y dependiendo de lo que quieras, esas cifras suben).

Alguien que tiene un negocio o que quiere empezarlo, suele tener claro que va a tener que invertir si quiere tener una página web profesional, por lo que el precio no suele ser un gran problema.

El problema llega cuando hablo acerca de la optimización de una página web, de la creación de contenidos, del marketing online, el posicionamiento en buscadores, etc.

Mucha gente se cree que con tener una página web ya está todo hecho. Déjame decirte que ese es únicamente el primer paso. Si una vez tengas tu web, no piensas hacer nada más, casi que mejor ni te gastes el dinero en una web, porque será precisamente eso: un gasto, en lugar de una inversión.

Si luego nadie visita tu web, no te sirve de nada. Por lo tanto ¿qué es lo que tienes que hacer para lograr visitantes?

1. ¿Tu web es interesante?

Este es normalmente el primer punto que suelo tocar cuando trabajo con mis clientes.

Tu web tiene que ser interesante para tus clientes potenciales, no para ti. Es decir, tu página web no puede solo tener 3 secciones donde lo único que haces es explicar lo bueno que eres, los años de experiencia que tienes y que tu empresa es líder en el sector.

Hablando en plata, todo eso le importa un pimiento a tus clientes potenciales.

Cuando un vistante llega a tu web, tiene que saber en menos de tres segundos de qué va la cosa. Qué es lo que hay interesante y tienes que lograr que le pique la curiosidad y quiera saber más.

Cuanto mas interesante sea tu página web, los visitantes entenderán más de qué va tu negocio y cómo puedes ayudarles.

Si encuentran contenidos de interés, invertirán su precioso tiempo visitar tus diferentes páginas y leer lo que tienes que contarles.

Incluso es posible que si lo haces muy bien, lo compartan con sus amigos y conocidos en las redes sociales.

Por lo tanto, es de vital importancia que seas capaz de generar contenidos de valor, de calidad y que ayuden a tus clientes potenciales a solucionar algunos de sus problemas.

Normalmente esto se suele hacer añadiendo un blog a tu página web. Pero ojo, además de añadir un blog, tienes que publicar de forma regular. Sino, no sirve de nada.

2. ¿Tu web es de fácil navegación?

Otro aspecto fundamental es el relativo a la usabilidad de tu página web. Si los usuarios no pueden navegar de forma sencilla por tu web, estás muerto.

Déjate de experimentos, de cosas demasiado modernas, de páginas web “artísticas”. Aquí hay que ir al grano. Un visitante tiene que llegar y saber en un segundo a donde le va a llevar cualquier enlace vea.

Desde el menú de navegación a los enlaces, todo tiene que ser obvio, lógico y claro.

Tienes que asegurarte de que cada página y cada sección de tu web tiene un único objetivo. Ese objetivo puede ser pedir más información, rellenar un formulario de contacto o simplemente hacer click en un enlace para ir a otra sección.

Lo mejor es ponerte en el lugar de un visitante y testear la web de arriba a abajo. Mejor aún, déjasela probar alguien sin decirle nada y mira qué es lo que hace y cómo lo hace.

Yo como profesional se qué es lo que tengo que hacer para que una web logre los objetivos propuestos.

Aunque también te digo que no son pocas las veces que un cliente me pide cosas simplemente porque le gustan, independientemente de que esas cosas estén alineadas con los objetivos de negocio.

Lo típico: ponme un banner aquí, un botón allá que diga esto o un slider allí con estas fotos. El que paga manda, pero luego no te quejes si no consigues nada.

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3. ¿Estás promoviendo activamente tu página web?

Digamos que ya tienes una página web interesante, con contenidos que gustan a tus clientes potenciales y que además es de fácil navegación.

Lo siguiente que tienes que hacer es decirle al mundo que existe. Con esto no quiero decir que salgas al balcón y empieces a gritar.

Ten en cuenta que cuando una página web es nueva, muy difícilmente te van a llegar visitas desde Google. Mucha gente tiene la idea equivocada de que el tráfico de Google es gratuito y no es así.

Lo que quiero decir, no es que tengas que pagar para obtener tráfico natural de Google, sino que para obtener ese tráfico vas a tener que hacer cosas que requieren de una inversión. Tiempo o dinero, tu eliges.

Google es un buscador. Los buscadores ayudan a la gente a encontrar contenidos de valor que solucionen los problemas que tienen. Si tu web la única información que ofrece es acerca de lo bueno que eres y lo bien que lo haces todo, no vas a tener muchas visitas.

Por lo tanto, si te quieres posicionar en Google, vas a tener que crear contenidos de una forma regular. Pero además no cualquier clase de contenido. Vas a tener que crear contenidos que tus clientes potenciales estén buscando activamente.

Para lograr esto no te queda otra que: o lo haces tu, o pagas a alguien para que lo haga. No le des más vueltas, no hay un botón mágico que haga que te lluevan las visitas. Bueno, miento, sí que lo hay: Google Adwords.

Google Adwords es la plataforma de publicidad de Google. Son esos anuncios que te aparecen arriba y a la derecha en la página de resultados de Google.

Si quieres visitas rápidas, ese es el camino. Invertir en publicidad de PPC (Pago por click). No te tienes porque limitar únicamente a Google Adwords. También puedes utilizar Facebook Ads, que no es más que la plataforma publicitaria de facebook.

No se si te has dado cuenta, pero volvemos otra vez a lo mismo. Vas a tener que invertir tu tiempo y tu dinero en aprender a hacerlo tu mismo o invertir tu dinero en contratar a alguien que lo haga por ti.

Entonces, ¿no hay una fórmula mágica?

He escrito este artículo porque día sí y día también me encuentro con clientes que buscan algo parecido a un milagro. Montar una web y que en un par de meses y sin hacer nada, las ventas se disparen. Déjame decirte algo: eso no existe.

Vas a tener que invertir tu tiempo y tu dinero. No te queda otra. Esto es un negocio y cómo en todos los negocios, para cosechar, primero hay que sembrar.

Si no dispones de presupuesto para invertir en promocionar tu web, vas a avanzar MUY lentamente. Si tienes algo para invertir, evidentemente avanzarás más deprisa.

Ah y olvídate de eso de “crear contenidos virales”. Últimamente lo escucho mucho y los casos donde eso ha funcionado son la excepción, no la norma.

Los contenidos virales se pueden “cocinar”, pero te aseguro que para hacerlo bien tendrás que invertir mucho más dinero aun (a menos que seas un experto en marketing, en psicología y en ventas).

Fuente: josecabello.net

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