Los peligros del azúcar
julio 5, 2018
Correspondencia Descubierta Revela Como la Industria del Azúcar Manipuló la Ciencia de los Alimentos Durante Décadas
Durante años, hemos sido advertidos acerca de los peligros de consumir demasiadas grasas o sal, pero las autoridades de salud y medios de comunicación han sido relativamente silenciosos acerca del azúcar, a pesar de haber tasas de obesidad cada vez más altas y problemas de salud en casi todas las áreas que han adoptado la alimentación procesada Occidental.
La triste realidad es que hay una gran cantidad de investigación, la cual se realizó durante muchas décadas, que muestra que consumir un exceso de azúcar daña su salud de muchas maneras; no obstante, la industria azucarera logró enterrar la evidencia y cubrirla con falsa ciencia que respalda sus propias afirmaciones, que exponen que el azúcar tiene poco o nada que ver con el aumento de peso y una mala salud.
En la actualidad, ellos quieren que continúe creyendo el mito obsoleto de que las grasas saturadas son las culpables, en vez del azúcar y las calorías que entran, y salen. Afortunadamente, la verdad empieza a salir a la luz, y muchas almas valientes han hecho frente para exponer y desmantelar el engaño orquestado.
Los Fraudes del Azúcar Son Expuestos
Uno de ellos es el periodista científico y autor, Gary Taubes, quien en el 2012 se asoció con Cristin Kearns, una dentista y compañera suya en la Universidad de California, en San Francisco, para escribir «Big Sugar’s Sweet Little Lies» (Las Pequeñas y Dulces Mentiras de la Industria del Azúcar). En su exposición, que apareció en Mother Jones, ellos escribieron que:1
«Durante 40 años, la prioridad de la industria del azúcar ha sido poner en duda los estudios que sugieren que su producto hace que las personas enfermen. En las pruebas federales, los científicos financiados por la industria citan los estudios financiados por la misma, para desestimar al azúcar como culpable«.
Su último libro, el cual será lanzado este otoño, es «The Case Against Sugar» (El Caso Contra el Azúcar). He leído este libro, y en breve, entrevistaré a Taubes. Si alguna vez tuvo alguna duda acerca de lo corrupta e influyente que es la industria azucarera, entonces simplemente debe leer este libro.
Taubes profundiza en el encubrimiento sistemático de la ciencia, al mostrar que el azúcar en efecto causa enfermedades, y es la causa más probable de nuestras actuales crisis de obesidad, diabetes, enfermedades cardiacas y cáncer. El libro de Gary lo expone mucho más detalladamente que el presente o el artículo publicado en The New York Times.2
Asimismo, docenas de científicos, de tres universidades de los Estados Unidos, se han unido para crear un sitio web educativo llamado SugarScience.org,3 orientado a que la investigación independiente acerca del azúcar esté disponible al público.
Kearns – entrevistado anteriormente por NPR–también ha sido noticia debido a un nuevo artículo en la Revista de la Asociación Médica Americana (JAMA, por sus siglas en inglés) de Medicina Interna,4 que detalla la influencia de la industria azucarera en las recomendaciones alimenticias.5,6,7,8,9,10
El Análisis Histórico Muestra Que la Industria Azucarera Ha Manipulado la Ciencia de los Alimentos
El análisis histórico de Kearns proporciona una prueba sustancial de que la industria azucarera ha manipulado, moldeado e influido, durante décadas, a la investigación alimenticia para exonerar al azúcar, y en vez de ello, culpar a las grasas saturadas. Según informó The New York Times:11
«Los documentos muestran que un grupo comercial llamado Sugar Research Foundation, conocido actualmente como Sugar Association, pagó a tres científicos de Harvard el equivalente a alrededor de $ 50 000 en dólares, para publicar un análisis realizado en 1967 acerca de la investigación sobre el azúcar, grasas y enfermedades cardiacas.
Los estudios utilizados en el análisis fueron elegidos por el grupo del azúcar, y el artículo,12 fue publicado en la prestigiosa revista New England Journal of Medicine, donde se minimizó el vínculo entre el azúcar y la salud cardiaca, y se lanzaron calumnias acerca del papel de las grasas saturadas.
A pesar de que el tráfico de influencias revelado en los documentos data de hace casi 50 años, los informes más recientes indican que la industria alimentaria ha seguido influyendo en la ciencia de los alimentos«.
Una Detestable Investigación Que Debería Levantar Sospechas
Algunos de los estudios que le dan luz verde al azúcar, claramente tienen las visibles huellas digitales de la industria, por todas partes. Por ejemplo, un estudio reciente13 llegó a la increíble y extraña conclusión de que consumir dulces podría ayudar a prevenir el aumento de peso, ya que los niños que los comen tienden a pesar menos que los que no lo hacen.
La fuente de los fundamentos revela que la base de tan extraña conclusión es: The Confectioners Association, que representan a los fabricantes de dulces como Butterfingers, Hershey y Skittles.
El año pasado, Coca-Cola Co. fue expuesto por canalizar millones de dólares a un grupo líder antiobesidad, al que se le pagó para desestimar el vínculo entre la soda y obesidad1–una relación que se ha establecido firmemente por muchos estudios anteriores.
Asimismo, ha surgido evidencia que muestra cómo la industria del azúcar influyó en la agenda científica del Instituto Nacional de Investigación Dental, en 1971, y creó un programa nacional contra la caries–una vez más, para minimizar cualquier vínculo entre el consumo de azúcar y la caries dental.15
Incluso, fue minimizado el papel del azúcar en la alimentación que consumen las personas que padecen diabetes, a pesar de sus evidentes riesgos. Como señaló Kearns en la anterior entrevista con NPR, a menudo, la bibliografía relacionada con la diabetes ni siquiera menciona la necesidad de restringir el azúcar.
Trágicamente, aunque la diabetes tipo 2 puede ser revertida exitosamente con una alimentación adecuada baja en azucares, en vez de ello, el enfoque se centra en el simple control de la enfermedad al utilizar insulina–una estrategia que por lo general empeora este padecimiento.
Además, a las personas que padecen diabetes se les insta a utilizar endulzantes artificiales, a pesar de que los estudios han demostrado claramente que los endulzantes artificiales fomentan un aumento de peso y la sensibilidad a la insulina empeora a un grado mayor que el azúcar.
Por otro lado, la investigación respaldada por Coca-Cola y Pepsi, llegó a la inquietante y altamente irresponsable conclusión de que beber soda de dieta era más útil para la pérdida de peso, en comparación con el agua pura.16
Las Directrices Alimentarias de los Estados Unidos Estaban Contaminadas Desde el Principio
De acuerdo con el análisis histórico de Kearns, en 1967, Mark Hegsted, un investigador de nutrición–quien falleció en 2009–fue uno de los científicos de Harvard a quienes pagaron para crear investigación para la industria del azúcar.
En 1977, mientras dirigía la oficina de nutrición en el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), Hegsted ayudó a redactar un primer documento que eventualmente se convirtió en las directrices alimentarias de los Estados Unidos.
En las décadas posteriores, los funcionarios de salud de los Estados Unidos han exhortado a los habitantes del país a adoptar una alimentación baja en grasas para prevenir las enfermedades cardiacas, y como resultado, en vez de ello, las personas cambiaron a los alimentos procesados, bajos en grasas y con altos niveles de azúcar.
Resulta que esta es la VERDADERA receta para tener enfermedades cardiacas; sin embargo, las industrias del azúcar y alimentos procesados han logrado mantener estos hechos en secreto todos estos años, al tomar el control y estructurar el análisis científico. El resultado final es claramente visible en las actuales estadísticas de salud.
En un editorial complementario,17 Marion Nestle, una profesora de nutrición, estudios alimenticios y salud pública de la Universidad de Nueva York, escribe:
«A partir de una inmersión profunda en los archivos de los años ’50s y ’60s, se ha producido evidencia convincente acerca de que una asociación comercial de azúcar no solo pagó, sino que también inició e influyó en la investigación que exonera expresamente al azúcar como un importante factor de riesgo para la enfermedad cardíaca coronaria (CHD, por sus siglas en inglés)«.
Como Formar la Opinión Pública a Través de la Investigación y los Programas Legislativos
Los registros, que son alrededor de 1 500, incluyen cientos de páginas de cartas y correspondencia entre científicos, nutricionistas y ejecutivos de la industria del azúcar. Los documentos fueron encontrados en los archivos de las compañías azucareras ya desaparecidas, así como en registros en la biblioteca de la Universidad, de investigadores ya fallecidos, quienes desempeñaron un papel clave en la estrategia de la industria.
Los registros revelan que ya desde 1964–un momento en que los investigadores comenzaban a sospechar una relación entre los tipos de alimentación con altos niveles de azúcar y las enfermedades cardiacas–John Hickson, un ejecutivo de la industria azucarera, presentó un plan acerca de cómo la industria del azúcar podría influir en la opinión pública «a través de nuestra investigación y programas de información y legislativos».
Como informó el artículo presentado:18 «Hickson propuso contrarrestar los alarmantes descubrimientos acerca del azúcar con la investigación financiada por la industria. ‘Entonces podemos publicar los datos y refutar a nuestros detractores’, escribió».
Esta fue la idea por la que se contrató a Hegsted y a otros dos científicos de Harvard, para examinar y refutar los estudios que relacionan a la alimentación cargada de azúcares con las enfermedades cardiacas. «Considero que es terrible», dijo Nestlé para The New York Times.19 «Simplemente, uno nunca ve ejemplos tan evidentes«.
El Dr. Walter Willett, Presidente del departamento de nutrición de la Facultad de salud pública TH Chan de Harvard, también observó que los documentos son un poderoso recordatorio de «por qué la investigación debe ser apoyada por fondos públicos en vez de depender del financiamiento de la industria».
Por desgracia, tomará mucho hacer tal cambio. Incluso, resulta difícil tomar medidas drásticas contra los conflictos de interés. Como Nestlé dijo para Bloomberg:20
«Por ejemplo, me han dicho en repetidas ocasiones que desde que escribí «Food Politics» (La Política Acerca de los Alimentos), no soy elegible para participar en comités federales de asesoramiento, porque soy demasiado parcial. Lo que esto me indica es que las personas que desde un principio se niegan a aceptar los fondos de la industria de los alimentos, son excluidos de la lista de candidatos.
Sin embargo, las personas que toman fondos de la industria son considerados aceptables, siempre y cuando revelen sus vínculos financieros debidamente, lo que por desgracia muchos no hacen«.
La Industria del Azúcar Responde
Mientras tanto, Sugar Association se mantiene firme en su postura, al responder al artículo de Kearns, con lo siguiente:21
«Cuestionamos los continuos intentos de este autor al replantear los sucesos históricos para alinearlos convenientemente con la tendencia actual del discurso contra el azúcar, en particular cuando las últimas décadas de investigación han concluido que el azúcar no tiene una función exclusiva en las enfermedades cardíacas«.
Es interesante señalar que la principal defensa de la industria azucarera es apoyarse en ¡una «base científica» de investigación contaminada por sus propias conclusiones! Tome como ejemplo su respuesta al trabajo del nutricionista británico, John Yudkin.
En 1972, Yudkin publicó el libro, «Pure White and Deadly» (Blanco, Puro y Mortal), en el que presentó décadas de investigación que apuntan hacia el azúcar en la alimentación–en vez de las grasas–como el factor subyacente de la obesidad y diabetes.
En respuesta, Sugar Association financió silenciosamente un artículo técnico llamado «Sugar in the Diet of Man» (El Azúcar en la Alimentación del Hombre), que afirma que el azúcar no solo era seguro y saludable, sino que es un importante alimento «energético».
El titular de la nota de prensa de Sugar Association, decía «Científicos Disipan los Miedos Hacia el Azúcar».22 Y mientras que financiaban el documento en cuestión, lo hicieron parecer como un estudio independiente.
El mayor apologista de Sugar Association fue Ancel Keys quien, con el financiamiento de la industria, ayudó a destruir la reputación de Yudkin, para desacreditarlo y etiquetarlo como un charlatán. La campaña de difamación fue un gran éxito, lo que hizo que la investigación de azúcar se detuviera.
Al igual que las industrias del tabaco y químicos, aquellos que se benefician del azúcar son muy hábiles para aplastar las voces disidentes, incluyendo a aquellos que se encuentran en los ámbitos de la ciencia.
Al silenciar las críticas acerca del azúcar, la industria azucarera fue capaz de continuar promoviendo a las grasas saturadas como el villano en la alimentación, a pesar de la falta de sustento científico. El siglo XXI trajo consigo las sodas súper grandes, junto con mayores problemas de salud, mientras la industria alimentaria continua mirando hacia otro lado–con la esperanza de que no se darán cuenta de la verdad.
Al igual que las grandes tabacaleras culpan a otros por el cáncer, las importantes empresas azucareras se han cubierto, a través de las prácticas aprendidas de la industria tabacalera, tales como mermar la ciencia, intimidar a los científicos, y socavar las políticas de salud pública.
¿Qué Cantidad de Azúcar Sería Demasiada?
Según un estudio realizado en el 2014,23 más de 7 de cada 10 adultos en los Estados Unidos obtienen al menos el 10 % de sus calorías diarias del azúcar; 1 de cada 10 recibe el 25 % o más de sus calorías diarias de los azúcares añadidos. También encontró que:
- Las personas que consumieron el 21 % o más de sus calorías diarias en forma de azúcar, fueron dos veces más propensas a morir por enfermedades cardiacas, en comparación con los que obtuvieron un 7 % menos de sus calorías diarias de azúcares añadidos
- El riesgo casi se triplicó entre los que recibieron el 25 % o más de sus calorías de los azúcares
Una investigación más reciente muestra que los tipos de alimentación que tienen un alto contenido de azúcar también son un importante factor de riesgo para las enfermedades cardiovasculares en los niños—y representan un riesgo significativo, incluso muy por debajo de los niveles actuales de consumo.
Como fue señalado en la última declaración científica acerca del consumo de azúcar de los niños, en la Asociación Americana del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés):24
«Hay mucha evidencia que sustenta que existe una relación entre los azúcares añadidos y un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares en los niños, a través de un mayor consumo de energía, de adiposidad y dislipemia…
[E]s razonable recomendar que los niños consuman ≤ 25 g[ramos] (100 cal[orias] o ≈ 6 cucharaditas) de azúcares añadidos por día y evitar, estos últimos, en los niños que son < 2 años de edad«.
De acuerdo con la AHA, los niños consumen un promedio de 19 cucharaditas de azúcar por día–cerca de tres veces más de lo recomendado, y la evidencia indica claramente que esta tendencia alimenticia va de la mano junto con nuestras actuales epidemias de obesidad y enfermedades crónicas.
Una sola lata de soda o ponche de frutas puede contener aproximadamente 40 gramos de azúcar, preparar bebidas endulzadas es especialmente peligroso para los niños pequeños.
Asimismo, los cereales para el desayuno, barritas de cereales, bagels y hojaldres tienden a contener altas cantidades de azúcares añadidos. Durante mucho tiempo, no hubo un verdadero límite recomendado para el azúcar, además de las recomendaciones para consumir azúcar «con moderación»–algo que es prácticamente imposible de hacer si come alimentos procesados.
Por fortuna, esto finalmente ha cambiado. Ahora, la AHA recomienda limitar el consumo de azúcares añadidos diarios a:
- 9 cucharaditas (38 gramos) para hombres
- 6 cucharaditas (25 gramos) para mujeres
- 6 cucharaditas (25 gramos) para niños y adolescentes entre las edades de 2 y 18 años
- Cero azúcares añadidos para los niños menores de 2 años de edad
Además, el Instituto Nacional de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) ha emitido recomendaciones acerca del azúcar, lo que sugiere que los niños entre las edades de 4 y 8 años deben limitar sus azúcares añadidos a un máximo de 3 cucharaditas diarias (12 gramos), y los niños de 9 años y mayores deben consumir una cantidad menor a 8 cucharaditas.
Aunque estoy de acuerdo con la recomendación general de que las personas sanas pueden consumir un máximo de 25 gramos; en mi opinión, prácticamente todo el mundo se beneficiaría de seguir la recomendación para los niños menores de 2 años de edad.
Recomendaciones Para Disminuir Su Consumo de Azúcares Añadidos
Una de las maneras más fáciles y rápidas de reducir drásticamente el consumo de azúcares añadidos y fructosa, simplemente es al comer comida verdadera, ya que la mayor parte de los azucares agregados, que finalmente consume, provienen de alimentos procesados. Otras formas para disminuir los azucares en su alimentación, incluyen:
- Reducir el consumo, con el objetivo de eliminar el azúcar que agrega a sus alimentos y bebidas o que consume en forma de alimentos procesados y bebidas azucaradas
- Utilizar Stevia o Lo-Han en vez de azúcar y/o endulzantes artificiales. Puede saber más acerca del mejor y el peor de los sustitutos de azúcar en mi artículo anterior, «Sustitutos del Azúcar–Lo Que Es Seguro y Lo Que No«
- Usar fruta fresca, en vez de frutas enlatadas o azúcar para preparar las comidas o recetas que requieran agregar un poco de dulzor
- Utilizar especias, en vez de azúcar, para darle sabor a sus alimentos
Fuente: mercola.com, 28/09/16.
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Argentina: Boom de exportaciones de azúcar
febrero 24, 2017
Boom de exportaciones de azúcar: subieron 211% en volumen
Según datos del Ministerio de Agroindustria, en 2015 se habían colocado en el exterior 182.128 toneladas por US$ 71.361.117. En tanto, en 2016 se vendieron 567.995 toneladas por un monto de 236,2 millones de dólares.
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Las exportaciones de azúcar crecieron 211% en volumen y 230% en valor en 2016, considerando las ventas al exterior en año calendario.
Según datos del Ministerio de Agroindustria, en 2015 se habían colocado en el exterior 182.128 toneladas por US$ 71.361.117. En tanto, en 2016 se vendieron 567.995 toneladas por un monto de 236,2 millones de dólares.
El boom sobrevino luego de que el Gobierno se propusiera sacar al exterior más de 400.000 toneladas que sobreofertaban el mercado local, deprimiendo además los precios para los productores.
«Nos habíamos propuesto exportar 467.000 toneladas para que no haya excedentes y terminamos colocando 100.000 toneladas más que eso», dijo a La Nación Néstor Roulet, secretario de Agregado de Valor del Ministerio de Agroindustria.
La salida de la mercadería al exterior, con la consiguiente baja de cualquier excedente interno, se facilitó por los cupos de exportación que se dieron a los ingenios.
Además, para aliviar la situación en el mercado local se subió 2% el etanol en las naftas (de 10 a 12%), lo que significó el uso de 200.000 toneladas de caña de azúcar para ese biocombustible.
El año pasado los productores de caña estaban protestando por sus bajos precios. Según Roulet, que ayer participó de una reunión de la Mesa Sucroalcoholera en Concepción, en la provincia de Tucumán, la bolsa de 50 kilos pasó de 160-180 pesos el año pasado a un valor actual de 480 pesos.
Fuente: La Nación, 24/02/17.
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Problemas en la industria azucarera
mayo 19, 2016
La caída de las barreras comerciales estremece a la industria azucarera
Los cambios radicales en las barreras comerciales que protegen a la industria del azúcar están rediseñando el mapa de uno de los mercados de commodities más protegidos del mundo.
Muchos de los países productores de azúcar protegen sus industrias nacionales mediante alguna combinación de precios mínimos garantizados a los agricultores, restricciones de producción o limitaciones de importaciones. Sin embargo, la industria se está liberalizando gradualmente a través de una serie de movimientos que podrían hacer caer el precio del producto. Esto hace que refinadores y exportadores se estén preguntando qué significará para ellos la apertura de los mercados.
El mayor cambio de todos los que se avecinan es la eliminación en la Unión Europea, a partir de octubre de 2017, de las cuotas de producción y precios mínimos para los productores de remolacha azucarera. Se espera que a raíz de esa medida los agricultores orienten gran parte de su oferta sobrante a la exportación, lo que convertiría a la UE en un competidor más importante en el mercado global.
Los cinco principales países exportadores en 2008, fueron Brasil, Tailandia, Unión Europea, India y Guatemala que representaron casi el 90% de las exportaciones totales a nivel mundial. De estos países, Brasil, que exporta un 68% de su producción, es con mucho el mayor exportador acaparando el 53% del total del comercio mundial.
Por separado, la Organización Mundial del Comercio analiza si Tailandia, el segundo mayor exportador de azúcar, infringió las reglas comerciales al subvencionar su producción. Es el resultado de un caso que presentó Brasil, el mayor productor y una gran voz a favor de la liberalización de los mercados. En África, las barreras también están bajo la presión de acuerdos comerciales regionales.
“Todo el mundo del azúcar va a ser sacudido”, dice Hartwig Fuchs, presidente ejecutivo de Nordzucker AG, el segundo mayor productor de Europa. Fuchs estima que ese continente tiene el potencial de añadir al mercado mundial 3,5 millones de toneladas de azúcar al año, lo que equivale a poco más de 6% del volumen del comercio mundial previsto para 2016.
Los cambios inminentes añaden incertidumbre al ya volátil mercado del azúcar. Después de cinco años de superávit productivo y estancamiento de los precios, el consumo del producto se apresta este año a superar la oferta. E l mercado ha repuntado en los últimos meses gracias a las sequías que golpearon las cosechas en muchas partes del mundo, pero los analistas creen que en el largo plazo los precios podrían ser presionados a la baja por la producción adicional que se volcará al mercado mundial.
La liberalización de la industria azucarera ha sido más lenta que los cambios en otros mercados agrícolas. En los países en desarrollo, este retraso refleja la presión que los gobiernos tienen para proteger a un sector intensivo en mano de obra.
El gobierno de EE.UU., que impone tarifas sobre el azúcar importado desde 1789, actualmente garantiza un precio mínimo a los productores nacionales, fija cuotas a los cultivadores y grava las importaciones. EE.UU., que es el sexto mayor productor del mundo, también muestra algunos signos de cambio inminente. Mientras tanto, la industria azucarera de Europa y África ya está en camino a una reestructuración.
Europa se convertirá en uno de los mercados de azúcar más libres del mundo en octubre de 2017, cuando la UE elimine las cuotas de producción y los precios mínimos. Estas medidas culminan un proceso que se inició con la reducción de los subsidios al azúcar tras un fallo de la OMC de 2005 que condenó a la UE por haber realizado dumping en los mercados mundiales. El caso fue presentado por Brasil, Tailandia y Australia.
Los productores de la UE —actualmente el tercer mayor productor de azúcar del mundo— planean fabricar y exportar más azúcar como resultado de estas medidas.
“La UE sin duda se convertirá en un exportador neto”, dice Olivier Lippens, director gerente de Finasucre SA, un fabricante belga. Lippens estima que las exportaciones netas podrían alcanzar hasta tres millones de toneladas al año.
La UE, sin embargo, mantendrá las restricciones a las importaciones de caña de azúcar. Esta combinación de medidas presionará a importadores como Tate & Lyle Sugars, cuya refinería de Londres ha venido transformando caña de azúcar en edulcorante desde hace 138 años. “El reloj está corriendo para nosotros”, dice Gerald Mason, vicepresidente de Tate & Lyle, mientras observa una grúa que descarga un cargamento de 35.000 toneladas de azúcar. “No vamos a ser competitivos después de 2017 a menos que se modifique la regulación”.
Muchos productores de azúcar en el Caribe y África dependen de las ventas a las refinerías europeas. “Las víctimas son quienes han estado suministrando azúcar a Europa durante más de un siglo, por desgracia”, dice Karl James, gerente de Jamaica Cane Products Sales Ltd., un exportador de Jamaica.
Brasil es otra de las posibles víctimas, ya que las reformas europeas pueden reducir el acceso del azúcar brasileño a ese mercado y crearle un nuevo competidor en el mercado internacional, dice Geraldine Kutas, asesora sénior de la presidencia de asuntos internacionales de Unica (la Unión de la Industria de la Caña de Azúcar de Brasil).
“Con la abolición de las cuotas de producción, los países más competitivos de la UE, como Francia y Alemania, aumentarán su oferta y reducirán las necesidades de importación del bloque en hasta 50%”, vaticina Kutas. El azúcar que importe la UE procederá de países con los que tenga acuerdos comerciales o cuotas sin impuestos. Brasil exporta hoy 600.000 toneladas de azúcar al año a la UE a través de un sistema de cuotas por el cual paga un impuesto de 98 euros por tonelada, sobre un precio medio de 350 euros. Como el país sudamericano no tiene un acuerdo de libre comercio con la UE, esa exportación puede desaparecer a partir de 2017, advierte Kutas.
El cambio también podría llegar a los productores de relativamente alto costo del Caribe, a los que puede resultarles difícil competir en Europa una vez que los precios caigan tras la eliminación de las cuotas.
En anticipación de la reforma de 2017, los productores europeos de remolacha azucarera han reducido los precios para ganar cuota de mercado. El impacto se hace sentir en toda la industria del azúcar de caña. La refinería que Tate & Lyle posee a orillas del río Támesis ya funciona a capacidad reducida y el pasado octubre, Jamaica Cane Productos Sales acordó prorrogar por un año un contrato de suministro de caña a esta firma a alrededor de US$370 la tonelada, muy por debajo de los US$770 por tonelada que habían acordado en su anterior contrato a tres años.
Los productores africanos probablemente también sufrirán cuando sus tradicionales mercados europeos sean más autosuficientes.
Illovo Sugar Ltd. , la firma sudafricana que es la mayor azucarera del continente africano, se está preparando para vender más en África, donde las barreras comerciales también se tambalean.
Los acuerdos bilaterales entre algunos países de África y la presión del bloque regional de comercio Comesa (siglas en inglés de Mercado Común de Africa Oriental y Meridional) para reducir las restricciones hacen que ese mercado luzca más atractivo, dice John Bason, director financiero de Associated British Foods PLC, la matriz de Illovo.
En un giro respecto de la decisión de la OMC de 2005 que comenzó a derribar las barreras europeas, Brasil está apuntando contra su ex aliado, Tailandia, a quien acusa de haber aumentado su participación en el mercado mundial mediante la subvención de sus exportaciones. En una compleja maniobra, el gobierno tailandés fija los precios internos del azúcar, establece impuestos sobre las ventas y utiliza estos ingresos fiscales para subvencionar a los cultivadores de caña. Brasil dice que esto es una violación de las normas de la OMC que cuesta a sus exportadores alrededor de US$1.000 millones al año. “Buscan un resultado similar al que consiguieron cuando demandaron a la Unión Europea”, dice João Botelho, analista de la firma de corretaje INTL FCStone Inc.
—Eduardo Magossi, en São Paulo, contribuyó a este artículo.
Fuente: The Wall Street Journal, 19/05/16.
China amarga el azúcar de Brasil
septiembre 28, 2015
El peso de la deuda y China amargan la industria azucarera en Brasil
Virgolino de Oliveira SA recorre un camino que ya conocen muchas empresas azucareras de Brasil que acumularon capacidad de producción para satisfacer la demanda china de materias primas para luego ver cómo esta se derrumbaba.
La compañía, ubicada en la región azucarera del estado de São Paulo, incumplió el pago de un bono que vencía en febrero y no ha podido renegociar con los acreedores, según Fitch Ratings. La empresa no pudo ser contactada para que comente al respecto, pero Claudio Miori, analista de Fitch, dice que es probable que solicite protección bajo la ley de bancarrota, con lo que se uniría a casi un quinto de los ingenios azucareros de Brasil que ya buscan ese alivio para cuentas y deudas sin pagar.
“Dejaron de pagarles a los cultivadores de caña de azúcar”, agrega Miori, en referencia a Virgolino de Oliveira. “Dejaron de pagarles a los bancos. Están a un escalón del default”, una calificación que acompaña una solicitud de protección por bancarrota.
Los males de la industria azucarera brasileña ofrecen una clara muestra de los problemas que enfrentan los mercados emergentes. La combinación de un crecimiento más lento en China y un exceso en la capacidad de producción de muchos commodities causó un desplome de los precios de las materias primas durante los últimos años.
Eso llevó a un declive de las monedas de los países que dependen de las exportaciones de commodities. Ahora, las empresas están sufriendo para pagar la deuda que emitieron para aumentar su capacidad instalada en los años de vacas gordas.
Virgolino de Oliveira vendió US$300 millones en bonos denominados en dólares en 2012 para expandir sus operaciones, anticipando que el precio del azúcar sin refinar, entonces a US$0,25 la libra, se mantendría en ese nivel. Otros ejecutivos azucareros en Brasil, el mayor productor mundial del insumo, hacían la misma apuesta: que una creciente clase media global mantendría en alza los precios de los alimentos, especialmente del azúcar.
Se equivocaron. Los precios del azúcar tocaron en agosto un mínimo de siete años y actualmente rondan los US$0,12 la libra.
“No sólo fue la fiebre del azúcar en Brasil”, dice Rashique Rahman, director de deuda de mercados emergentes de Invesco Ltd., que gestiona US$776.400 millones en activos. “Fue un mercado alcista con una amplia base para los mercados emergentes. Las tasas de interés eran bajas, China estaba comprando todo lo que veía. Eran días felices. Creemos que ahora el ciclo está cambiando”.
Desde inicios de 2010, los inversionistas han inyectado más de US$1 billón en bonos de mercados emergentes, según el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, por sus siglas en inglés). Brasil captó 10% de ese capital. Sin embargo, el flujo de dinero hacia los bonos de mercados emergentes ha caído marcadamente, a US$53.800 millones, en los primeros ocho meses del año, según el IIF. Eso representa un descenso de 49% frente al mismo período del año previo.
Conforme crecía la ansiedad sobre los mercados emergentes, los inversionistas empezaron a desprenderse de los bonos brasileños en junio y se estima una salida de US$5.900 millones entre junio y agosto.
La posibilidad de un alza de las tasas de interés en Estados Unidos, que Janet Yellen, la presidenta de la Reserva Federal, dijo la semana pasada era probable, es otro motivo que reduce el encanto de la deuda de alto rendimiento de los mercados emergentes.
En Brasil, la turbulencia política está aumentando la presión sobre la deuda del gobierno y las empresas, así como sobre el real. El 9 de septiembre, Standard & Poor’s Ratings Services fue la primera agencia de calificación de riesgo en ubicar al país latinoamericano en categoría de “chatarra”.
En lo que va del año, el real ha perdido 33% frente al dólar, lo que lo convierte en una de las monedas de mercados emergentes de peor desempeño.
El epicentro de la crisis se puede encontrar en la región centro sur de Brasil, donde se procesa 90% de la caña de azúcar del país. Desde que el auge de los commodities de la década de 2000 empezó a desinflarse, 80 ingenios azucareros de 300 han cesado de operar, según Unica, la Unión de la Industria de la Caña de Azúcar. Se espera que otros 10 lo hagan este año, de acuerdo con el grupo.
En estos ingenios, la caña es partida y exprimida bajo alta presión para obtener el jugo de caña que luego se convierte en cristales, que posteriormente son empacados y enviados a los puertos. El etanol, que es un combustible altamente usado en Brasil, es a menudo producido en estos mismos ingenios.
Las plantas insolventes intentan vender la mayor cantidad de azúcar posible para mantenerse a flote, dicen comerciantes y productores, lo que se suma al exceso de oferta que deprime los precios. Los inventarios del edulcorante están en su nivel más alto en al menos 35 años, según el Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA, por sus siglas en inglés).
En 2010, la producción de azúcar en Brasil llegó a un récord de 38,4 millones de toneladas, el doble de una década atrás. Para la cosecha que empieza el primero de octubre, la producción del país está fijada en 36 millones de toneladas, según estimaciones del USDA.
Mientras tanto, hay señales de una debilidad de la demanda. China importó 25% menos azúcar en agosto que en igual mes del año previo, según Price Futures Group.
“Brasil dependió demasiado de los commodities”, dice Michael McDougall, director de negociación de materias primas de Brasil de Société Générale en Nueva York. “Ahora paga las consecuencias”.
Algunos ingenios brasileños prosperan a pesar de una inflación acelerada y las altas tasas de interés en el país.
“Esta es una industria muy grande”, dice Andy Duff, director de alimentos y negocios agrícolas de Rabobank Brsail. “Hay una gran diversidad en términos de modelos empresariales, en términos de estados financieros”.
Los ingenios con mejor desempeño suelen ser más diversificados, tienen matrices más grandes que los mantienen a flote y están cerca de los puertos, dice Fitch.
De todas formas, el panorama es sombrío. En promedio, los ingenios tienen una deuda 27% más pesada este año por tonelada de caña de azúcar, en moneda local, comparado con el año pasado, según Rabobank.
Igualmente, la depreciación del real frente al dólar desde comienzos de año no ha impulsado de forma importante la competitividad de los exportadores brasileños, señala Fitch.
En Sertãozinho, un pueblo a unos 320 kilómetros de la ciudad de São Paulo, y conocido como la capital azucarera de Brasil, cerca de 10% de los trabajadores de la industria han perdido sus empleos en los últimos dos años, dice Antonio Tonielo, cuya empresa, Viralcool, posee tres ingenios en Sertãozinho. “Hace cinco años (…) empezamos a producir más azúcar, y cuando se hace eso ¿qué pasa?”, pregunta. “Se deprimen los precios y hoy estamos pagando el costo por esa alta producción”.
—Jeffrey Lewis contribuyó a este artículo.
Fuente: The Wall Street Journal, 28/09/15.
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Por qué invertir en Caña de Azúcar
mayo 4, 2015
¡Excelente Oportunidad de Inversión en Argentina!
CondoAzucar es el Primer Fideicomiso productivo de caña de azúcar que permite participar, como Productor, de los beneficios por la obtención y venta de alcohol, etanol y azúcar, a las industrias.
Inicia su actividad en el año 2013 y ya se ha posicionado como una de las seis inversiones con mejor rentabilidad en el país, durante el período 2013 y 2014 [Revista Forbes –Edición Dic/2014], y una alternativa altamente recomendada por los medios locales más acreditados [Cronista Comercial – Supl. Negocios, Edic 4/Sept/2014; Revista Bank- Edición Dic/2014, entre otras.].
Los Fiduciantes han tenido una revalorización notable de su inversión en estos 20 meses de existencia, creciendo de $19.900 a $49.900 el valor de la cuota parte; por su estructura de evolución financiera que se genera a través de la inmediata conversión del Aporte Fiduciante en Pesos a Pesos Azucareros (mix en términos de la producción e insumos del negocio), que permiten su actualización y evolución de la inversión, que en términos comparativos frente a la inflación logrando habitualmente superarla [Período Jun/2013 – Ene/2015: Inflación 64.85% (Fuente: Indice difundido por Consultoras Privadas a través del Congreso de la Nación); $ Az: 135,68% (Fuente: Ingenios Azucareros de Salta y Jujuy) ].
La estructura productiva del negocio, se basa en la explotación racional de excelentes cañaverales, completamente desarrollados y consolidados, en fincas de Salta y Jujuy, que una vez cosechados se regeneran, repitiendo el ciclo.
Durante las cinco Zafras que dura el Fideicomiso, el producido de cada cosecha o zafra, es destinado al sostenimiento productivo y al pago de Dividendos.
El otro pilar que garantiza el buen destino del Fideicomiso, son los “Contratos de Maquila y Comercialización”, logrados con los dos Ingenios más importantes del país, que se obligan – a través de este instrumento legal – a que toda la producción que se obtiene (toneladas de caña que se zafran), será industrializada y pagada por éstos mismos Ingenios, que las procesan y comercializan por cuenta del fideicomiso (azúcar, alcohol “buen sabor” y bioetanol para combustible).
Si es de su interés invertir en CondoAzucar puede hacerlo desde $49.900 finales por cuota parte (equivale a los derechos por la adquisición de explotación y usufructo, de 1 hectárea de los cañaverales del Fideicomiso durante cinco zafras); siendo ésta la única erogación “de bolsillo” que realiza.
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Más información:
BANK dic 2014 condoazucar
Forbes.dic 2014.Condoazucar
Peras y Manzanas
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